En muchos aspectos de la vida, habrá un antes y después de la pandemia. Parece que el 2020 no sólo será recordado por el Coronavirus, sino también por abordar problemas sociales que aún no se han resuelto. Por ejemplo, las estadísticas están comenzando a arrojar luz sobre el perfil de los más afectados por la enfermedad, revelando a veces claras desigualdades sociales. Las protestas y los cambios que se están produciendo en el mundo entero, provocados por eventos ocurridos en los EE. UU. (pero que ciertamente no son exclusivos de ese país), demuestran que perpetuar ciertas acciones, actitudes o creencias sobre otros seres humanos puede tener efectos devastadores.
A medida que comenzamos a pasos escalonados la recuperación de la crisis actual, tenemos la oportunidad de hacer las cosas de manera diferente, de hacer las cosas mejor. El siguiente extracto de un discurso pronunciado por Mawlana Hazar Imam, nos da una comprensión clara de lo que implica el pluralismo, sus desafíos y cómo abordarlos:
“Durante mucho tiempo, como saben, el término más utilizado para describir la búsqueda de la comprensión humana fue la palabra "tolerancia". De hecho, fue una de las palabras que se utilizó en el texto de 1955 para describir uno de los objetivos de esta conferencia de Jodidi.
En los últimos años, nuestro vocabulario al discutir este tema ha evolucionado. Una palabra que hemos llegado a usar más a menudo en este sentido es la palabra "pluralismo". Y la otra es la palabra "cosmopolita".
Es posible que sepan que nuestra red AKDN, hace una década, cooperó con el Gobierno de Canadá para crear un nuevo Centro Global para el Pluralismo con sede en Ottawa, diseñado para estudiar más de cerca las condiciones bajo las cuales las sociedades pluralistas pueden prosperar.
Una sociedad cosmopolita y pluralista es una sociedad que no sólo acepta la diferencia, sino que busca activamente entenderla y aprender de ella. Desde esta perspectiva, la diversidad no es una carga que se deba soportar, sino una oportunidad que se debe acoger.
Una sociedad cosmopolita considera los hilos distintivos de nuestras identidades particulares como elementos que aportan belleza al tejido social en general. Una ética cosmopolita acepta nuestra responsabilidad moral última ante toda la humanidad, en lugar de absolutizar una parte presumiblemente excepcional.
Quizás es condición natural de una raza humana insegura buscar seguridad en un sentido de superioridad. Pero en un mundo donde las culturas se interpenetran cada vez más, se necesita una perspectiva más segura y más generosa.
Lo que esto significa, quizás por encima de todo, es la disposición a participar en un verdadero diálogo con la diversidad, no sólo en nuestras relaciones personales, sino también en las relaciones institucionales e internacionales. Pero eso requiere trabajo y requiere paciencia. Sobre todo, implica estar dispuesto a escuchar.
Lo que se necesita, como dijo la ex Gobernadora General de Canadá, Adrienne Clarkson, y cito, es una disposición "para escuchar a su vecino, incluso cuando no le guste especialmente." ¿Está claro ese mensaje? ¡Escuchas a las personas que no te gustan!
Una ética cosmopolita reflexiva es algo muy diferente de algunas actitudes que se han asociado con el concepto de globalización en los últimos años. Con demasiada frecuencia, ese término se ha relacionado con un universalismo abstracto, quizás bien intencionado, pero a menudo ingenuo. Al enfatizar todo lo que la raza humana tenía en común, fue fácil quitar valor a las identidades que nos diferenciaban. A veces hablamos tanto de lo iguales que somos todos que descuidamos las maravillosas formas en que podemos ser diferentes.
Un resultado de esta visión superficial de la armonía global homogeneizada, fue una reacción contraria adversa. Algunos consideraron que significaba la difusión de una cultura global popular y americanizada, lo cual era injusto y una evaluación errónea. Otros temían que sus identidades individuales, étnicas o religiosas pudieran ser arrastradas por un orden económico súper competitivo o por algún régimen político supranacional. Y la reacción más frecuente fue una feroz defensa de las identidades anteriores. Si la cooperación significaba homogeneización, muchos se posicionaron en el "No."
Pero la elección u opción entre lo global y lo tribal – entre el concepto de la pertenencia universal y el valor de las identidades particulares – era, de hecho, una elección falsa. El camino hacia un mundo más cooperativo no requiere que borremos nuestras diferencias, sino que las comprendamos.
Un proceso de globalización responsable y reflexivo es, en mi opinión, auténticamente cosmopolita, respetando tanto lo que tenemos en común como lo que nos hace diferentes.
Quizás nuestra naturaleza sea ver la vida como una serie de elecciones entre dualidades claramente definidas; pero, en realidad, la vida es más una cuestión de evitar falsas dicotomías, que pueden conducir a extremos peligrosos. La verdad del asunto es que podemos abordar las disfunciones de la fragmentación sin oscurecer los valores de la diversidad.
Una ética cosmopolita también será sensible al problema de la inseguridad económica en nuestro mundo. Es un factor enorme que contribuye a los problemas que he estado discutiendo. La pobreza endémica para muchos millones todavía corroe cualquier percepción significativa de oportunidad. E incluso en sociedades menos empobrecidas, una creciente ola de ansiedad económica puede dificultar que aquellas personas temerosas respeten, y aún menos acepten, lo que es nuevo o diferente.”
Extracto del discurso pronunciado por Mawlana Hazar Imam en la conferencia Samuel L. y Elizabeth Jodidi Universidad de Harvard, 12 de noviembre 2015
https://www.akdn.org/speech/his-highness-aga-khan/samuel-l-and-elizabeth...
Estamos viviendo unos tiempos marcados por la polarización de ideas. Es importante que tanto nosotros como las generaciones futuras nos equipemos con una comprensión sólida de lo que es la diversidad y el pluralismo, para que podamos protegernos de la estrechez de miras que excluyen a aquellos que son diferentes a nosotros. La página web del Centro Global para el Pluralismo es una fuente de información excelente para la comprensión del concepto de Pluralismo y su aplicación en diferentes terrenos.