Mis amados hijos espirituales,
Con ocasión de Eid ul-Fitr, envío mis especiales y amorosas bendiciones a mis Jamats de todo el mundo para su felicidad, paz, seguridad y buena salud. Mi familia se une a mí para desearos a todos, Eid Mubarak.
Mientras que las instituciones del Jamat y de AKDN siguen colaborando con los diversos gobiernos, autoridades de salud pública y otros socios para tratar de superar el desafío de la pandemia del Covid-19, me gustaría que mis hijos espirituales continuaran ejerciendo el máximo rigor en la adopción de todas las medidas individuales para salvaguardar su propia salud, tal y como recomiendan las autoridades de salud pública y mis instituciones.
En este difícil período, aplaudo con la mayor admiración y gratitud los generosos servicios prestados por todos mis voluntarios del Jamat, así como los prestados por los médicos, enfermeras, paramédicos y auxiliares tanto de AKDN como de otras instituciones sanitarias y entidades afines: Su coraje ejemplar, su compromiso y su dedicación para brindar atención y consuelo a mi Jamat y a otros, y especialmente a los que son vulnerables y están enfermos, es una notable actualización de los valores humanos y la ética que comparten todas las religiones.
Deseo que mi Jamat mire al futuro con esperanza y valor, manteniendo su larga tradición de unidad, generosidad y apoyo mutuo, que le ha permitido en todo momento, de generación en generación, avanzar hacia una posición de mayor fuerza y resistencia.
Mis hijos espirituales deben tener siempre presente que son los principios de nuestra fe los que nos traen paz y consuelo en estos tiempos de incertidumbre. Estoy con mi Jamat en todo momento, y cada uno de vosotros, individualmente, está siempre en mi corazón, en mis pensamientos y en mis oraciones.
Envío mis más afectuosas bendiciones paternales y maternales a todo mi Jamat - para la felicidad, la buena salud, la confianza y la seguridad en sus vidas futuras, y para Mushkil-asan.
Afectuosamente,
Aga Khan